Patatas bravas
Hola Cocinitas!! Huele a fin de semana y preparamos unas PATATAS BRAVAS deliciosas para el aperitivo de estos días. Es ideal para tomar una cerveza fresquita y compartir con aquellos que más queremos. Celebremos el fin de semana!
Una cerveza fresquita, un tinto de verano o el refresco que más nos guste son ideales para acompañar estas patatas bravas, uno de los aperitivos por antonomasia de la gastronomía española.
Una vez más hablamos de la calidad de la materia prima, para conseguir unas buenas patatas bravas es recomendable usar patatas especiales para freír y, a ser posible, que no sean patatas nuevas, ya que así nos aseguramos que tengan menos agua y nos quedarán más crujientes.
En cuanto a la salsa, como sucede con casi todas las recetas, en cada cocina se le da un toque diferente. Yo os voy a mostrar cómo la preparo, teniendo en cuenta que en casa nos gusta el picante bastante. Aunque lo suavizo poniendo un poco de mayonesa.
Ingredientes:
- Patatas (especiales para freír)
- Aove
Para la salsa picante (brava):
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- Aove
- 1 cucharada de pimentón de la Vera picante
- 2 pimientas de cayena
- 3 tomates grandes pelados (puedes ver cómo pelarlos fácilmente aquí)
- 1 cucharadita de azúcar
- Una pizca de azafrán
- 1 cucharadita de sal
- Un chorro de vinagre
Elaboración:
Comenzamos pelando las patatas, las lavamos, escurrimos y secamos bien con un papel de cocina. Las cortamos en cubos o dados de unos 5 cm de grosor.
Ponemos un cazo grande y vertemos aceite de oliva virgen extra hasta llenar a la mitad. Vamos a confitar las patatas, para ello las ponemos en el aceite en frío y dejamos que se caliente a temperatura media, bajamos el fuego al mínimo y las mantenemos en el aceite muy lentamente durante 15 minutos. Cuando ya estén tiernas las sacamos del cazo, escurriendo muy bien, con la ayuda de un escurridor, y las metemos en la nevera para que se enfríen rápidamente.
preparamos la salsa
Mientras preparamos la salsa. Para ello pelamos la cebolla y la picamos muy finito. Ponemos un cazo con un chorrete de aceite y la sofreímos junto con los ajos, también muy picados. Cuando la cebolla esté transparente, añadimos las cayenas y removemos.
Retiramos del fuego porque vamos a añadir una cucharada de pimentón de la Vera y no queremos que se queme, también ponemos el azafrán, removemos muy bien, para que todos los ingredientes queden bien integrados.
Volvemos a poner el cazo al fuego y echamos los tomates pelados y troceados en cuartos, junto con el azúcar, para eliminar la acidez del tomate y un poquito de sal. Lo cocinamos durante unos minutos, removiendo, y cuando el tomate quede frito, le echamos un chorro de vinagre, mezclamos. Retiramos las cayenas. Retiramos del fuego y licuamos con la batidora, hasta que nos quede una salsa fina.
Ahora vamos a dar el toque final a las patatas, las sacamos de la nevera y las ponemos en una sartén con bastante aceite, cuando esté bien caliente freímos las patatas hasta que queden doradas. Con este proceso tendremos unas patatas doradas y crujientes por fuera, pero a la vez tiernas por dentro. Al sacarlas de la sartén las dejamos sobre papel absorbente, para eliminar el exceso de aceite.
Ya sólo nos queda colocar en un plato o bandeja para servir y regar con la salsa que hemos preparado y un poco de mayonesa.
Que lo disfrutéis Cocinitas!! Hasta la próxima!!
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